Los mejores discos de Genesis

En este episodio revisaremos los mejores y peores discos de estudio de Genesis. Banda gringa de rock progresivo que, según Spotify, tiene entre las ciudades que más escuchan sus rolas a Londres, Santiago de Chile, Sydney (Australia), Amsterdam (Países bajos) y Melbourne (Australia).

Era Peter Gabriel

Nursery Cryme (1971)

Discazo
Tercer álbum de estudio
100% de buenas canciones
7 de 7
6 para playlist: 1, 3 al 7

¿Para volver a escuchar? De todas maneras. Primera parte tremenda con 2 temazos conceptuales que te envuelven y no te sueltan más y una segunda mitad al mismo nivel.

¿Para regalar en vinilo? Recomendado para fans de la banda, del rock progre y coleccionistas de buenos discos.

Representa una leve mejora respecto al 83% de su antecesor Trespass (1970), pero de todas formas pelean palmo a palmo.

Primera mitad buenísima con 2 temazos: su clásico The Musical Box (10:25) en la apertura y el vertiginoso y expansivo track 3 The Return of the Giant Hogweed (8:09).

La segunda parte es un bombardeo de temazos seguidos que van desde la preciosa Seven Stones (04), la simpática y pianística Harold The Barrel (05), la bellísima Harlequin (06), hasta el tremendo cierre conceptual número 7 The Fountain of Salmacis de 8:01.

Selling England By The Pound (1973)

Discazo
Quinto álbum de estudio
100% de buenas canciones
8 de 8
5 para playlist: 1, 3 al 5 y 7
Sin caídas

¿Para volver a escuchar? De todas maneras. Primera y segunda mitad plagada de temazos que atrapan y entretienen.

¿Para regalar en vinilo? 100% recomendado a fanáticos de la banda, del rock progresivo y coleccionistas de buenos discos.

Obra cumbre. Joya de la banda, del rock progresivo y de la música. Entretención y genialidad en cada nota. ¡Bravo! Y muchas gracias.

The Lamb Lies On Broadway (1974)

Casi perfecto
Sexto álbum de estudio
95,6% de buenas canciones
21 de 22
13 para playlist

Disco 1
100% de buenas canciones
11 de 11
8 para playlist: 1, 3 al 5, 7 y 10
Sin caídas

Disco 2
91,6% de buenas canciones
11 de 12
5 para playlist: 1, 5, 9, 11 y 12
Caídas: track 2

¿Para volver a escuchar? Recomendado, pero con tiempo. Se trata de 1 hora con 34 minutos complejos, a veces poco oreja, un largo viaje por una infinidad de rincones sonoros inesperados con sus teclados espaciales y otras hiervas. Primer disco un poco más arriba que el segundo, pero ambos son de alto nivel.

¿Para regalar en vinilo? Totalmente. Es el último con Peter Gabriel, y pese a que varios de sus discos anteriores son un poco mejores, este disco doble se encuentra entre las cartas de presentación de la banda y tanto fans de la banda, del rock progre o coleccionistas de vinilos te lo van a agradecer.

Trespass (1970)

Muy bueno
Segundo álbum de estudio
83% de buenas canciones
5 de 6
1 para playlist: 6
Caídas: track 4

Foxtrot (1972)

Regular
Cuarto álbum de estudio
66% de buenas canciones
4 de 6
3 para playlist: 2, 3 y 5
Caídas: tracks 4 y 6

Era Phill Collins

1er lugar: Duke (1980)

Discazo

Décimo álbum de estudio

100% de buenas canciones

12 de 12

Todas a playlist
Sin caídas

¿Para volver a escuchar? Una y mil veces. Un viaje lleno de coros oreja, baladas (Alone Tonight) y atmósferas interespaciales a cargo de los sonidos expansivos de los sintetizadores ochenteros. Un disco que nos saca de este mundo y nos teletransporta a otras galaxias y dimensiones.

¿Para regalar en vinilo? 100% recomendado para fanáticos de la banda y coleccionistas de grandes obras.

Cuarto discazo al hilo con 100% de temazos. Obra maestra, perfección. Incluye los clásicos Man Of Our Time (track 3), Misunderstanding (4). El mejor de la era Collins, peleando palmo a palmo con su otra obra maestra A Trick of The Tail publicada 4 años antes.

2do lugar: A Trick of The Tail (1976)

Perfecto
Séptimo álbum de estudio

100% de buenas canciones

8 de 8

Todas a playlist

Sin caídas

¿Para volver a escuchar? Totalmente. Es el primero con Phill Collins al mando y se nota. Equilibra de forma perfecta su don de compositor oreja con las voladas expansivas del rock progre. Una verdadera joya. Es un disco de 51 minutos con 22 segundos para escuchar sin saltarse ningún tema. Perfección.

¿Para regalar en vinilo? 100% recomendado. Una obra maestra que te agradecerán fans del rock proge, coleccionistas de grandes discos y obviamente los fanáticos de la banda.

Representa una mejora de casi 5 puntos respecto al 95% de su antecesor The Lamb Lies On Broadway (1974), el último con Peter Gabriel.

Primera y segunda mitad notables que no te sueltan nunca y que si bien se expanden dentro de los códigos del rock progresivo, en cada tema es posible escuchar momentos oreja y poperos del sello Phill Collins, marcando una diferencia clara desde el primer disco respecto a la era Gabriel, mucho más rebuscada y densa. Notable. Incluso el tema de cierre, que es instrumental en donde Collins se engolosina con un solazo de batera, su nuevo líder deja un pequeño pasaje vocal que estimula el oído.

3er lugar: Wind and Wuthering (1976)

Perfecto
Octavo álbum de estudio

100% de buenas canciones

9 de 9

8 para playlist: 1 al 3, 5 y 6

¿Para volver a escuchar? Absolutamente. Primera mitad con un tremendo comienzo que te atrapa al toque y dos joyas en la segunda parte. Cero caídas, según discazo al hilo de la mano de Collins.

¿Para regalar en vinilo? 100% recomendado para fanáticos dela banda, coleccionistas y amantes del rock progre.

Segundo disco perfecto al hilo de la primera etapa de la era Phill Collins. Nuevamente conjugan de forma maestra la expansión progre con las composiciones orejísimas del maestro a cargo de la batera, volviendo al rock progre más cercano y amable. Nuevamente la batería que se roba la película.

4to lugar: …And Then There Were Three… (1978)

Discazo

Noveno álbum de estudio

100% de buenas canciones

11 de 11

8 para playlist: 1 al 5, 7, 8 y 10

¿Para volver a escuchar? De todas formas. Primera mitad no te suelta en cada uno de sus 5 temas y la segunda mantiene el tremendo nivel con temas preciosos con 3 nuevas joyas para volver a disfrutar.

¿Para regalar en vinilo? 100% recomendado

Tercer disco al hilo con 100% de buenas canciones de la era Phill Collins. Un monstruo.

5to lugar: Invisible Touch (1986)

Correcto/bueno
Decimotercer álbum de estudio

87,5% de buenas canciones

7 de 8

5 para playlist: 1, 3 al 5 y 7

1 caída: track 8

¿Para volver a escuchar? Muy recomendado.

¿Para regalar en vinilo? Sí, a fans de la banda y coleccionistas de grandes discos.

Representa una mejora de 10 puntos respecto al 77% de su antecesor Genesis (1983). Un renacer luego de la travesía por el desierto que significaron sus dos discos previos.

Muy buena primera mitad con cero caídas y 3 temas para playlist. La segunda parte nos regala 2 nuevas joyas y quizá la única caída del disco, aunque 100% abierto a discutirlo: la pista 8 que cierra, un instrumental de teclados muy básico y sin mucho espíritu.

6to lugar: Genesis (1983)

Correcto/bueno
Duodécimo álbum de estudio

77% de buenas canciones

7 de 9

5 para playlist: 2, 3, 6, 8 y 9

2 caídas: tracks 1 y 4

¿Para volver a escuchar? Quizás, no tiene un buen comienzo lo que le quita muchos puntos para recomendarlo y ese track 1 con 3 minutos de sonidos de fábrica pegándole a un metal, que aburrimiento. De todas formas tiene 2 clásicos en el track 2 y 3.

¿Para regalar en vinilo? No, sólo a fans de la banda

Representa una mejora de 11 puntos porcentuales respecto al 66% de su antecesor Abacab (1981).

Primera mitad irregular con 2 temas para playlist pero también 2 caídas bien feas entre ellas el track 1 y esos primeros 3 minutos de sonidos de fábricas distópicas, aburrido.

La segunda parte, por el contrario, coagula de buena forma sin presentar caídas, con 3 joyas para playlist, dos de ellas en el cierre del disco.

7mo lugar: Abacab (1981)

Undécimo álbum de estudio
Regular

66% de buenas canciones

6 de 9

5 para playlist: 1, 2, 7 al 9
Caídas: 2, 3 y 6

¿Para volver a escuchar? No, con una vez basta para conocerlo. 

¿Para regalar en vinilo? No, sólo a fans de la banda

Representa una caída importante de 34 puntos porcentuales respecto al 100% de su predecesor Duke y su notable 100%. Primera caída de Collins luego de 4 discazos al hilo desde que toma el timón de la banda.

Si bien abre de muy buena con las canciones oreja de rigor (1 y 2), caen muy profundo en los tracks 3 y 4, con bases repetitivas, exploratorias y demasiado cargadas a la cosa industrial que suena un tanto pretensiosa con todo el imaginario de "revolución de las máquinas", muy moda de la época, lo cual le quita fuerza a los temas y los torna aburridos y poco oreja. Incluso Phill no nos regala solazos de batera como en los discos previos.El track 5 incluso tiene una guitarra funky de muy mal gusto, desabrida, muy white man sin onda.

Sin embargo, luego de esa sima compositiva en el medio del álbum, vuelven a recuperarse con 3 joyitas orejas al hilo desde la pista 7 a la 9, que sumadas a las 2 primeras nos dejan como saldo 5 nuevas gemas para coleccionar.